Por décadas y desde el año 1930 los productores lecheros han reconocido el valor de suplementar dietas de la vacas lecheras con minerales trazas. Aun cuando son requeridos en pequeñas cantidades, los minerales trazas como cobre, manganeso, zinc y cobalto son vitales para la salud y productividad de los animales ya que apoyan diversas funciones fisiológicas, como la inmunidad, la fertilidad y el metabolismo, por este motivo a lo largo del tiempo han sido incorporados en las dietas animales. Sin embargo a partir de diversos estudios sea evidenciado que existe la necesidad de actualizar la suplementación de minerales trazas a fuentes orgánicas debido a las siguientes causas:

  • Los minerales trazas en forma de sulfatos tienen una alta reactividad en el rumenEsto se debe a que los minerales trazas a base de sulfatos tienen enlaces iónicos débiles que son significativamente más solubles en agua (fluido ruminal).
  • Los minerales traza en forma de sulfato pueden dañar los microorganismos benéficos del rumen una vez disociados el ion metalico zinc y cobre que originalmente se encuentran unido al sulfato y posee propiedades antimicrobianas.
  • Los minerales traza en forma de sulfato reducen la digestibilidad de la fibra al afectar los microrganismos que juegan un rol esencial en la producción de ácidos grasos y digestión de FDN.

En la búsqueda de crear soluciones a las fuentes de minerales inorgánicos, para la nutrición animal, Pancosma crea una premezcla de complejos orgánicos de alta biodisponibilidad, en base a glicinatos de zinc, manganeso, cobre y cobalto en una partícula micro cristalina que llamada BTRAXIM® PRO-4, de uso en alimentos de ganadería (ganado de engorda y leche, terneros, caballos y cabras)


La absorción de nutrientes del intestino y su incorporación a las vías bioquímicas celulares están influenciados por muchos factores físicos y químicos ya antes mencionados, que tienen efectos adversos sobre la absorción y la utilización metabólica (biodisponibilidad) de estos elementos por parte de las células. Algunos de estos efectos están directamente relacionados con ciertas formas químicas de los elementos, o con la presencia de otros iones inorgánicos, que tienen el mismo mecanismo de absorción.

Es por ello que la unión de iones metálicos a sustancias orgánicas ligados a través de átomos donantes (oxígeno, nitrógeno, azufre) conduce a una mayor disponibilidad biológica de estos elementos. Esto es probablemente causado por un mecanismo de absorción diferente a través de mecanismos de absorción de péptidos y aminoácidos, o por mecanismos de absorción alternativos.

Además existen estudios comparativos de la disponibilidad biológica de formas orgánicas e inorgánicas de oligoelementos demostraron que los oligoelementos ligados a sustancias orgánicas son más resistentes a los efectos de otras sustancias químicas. Estas formas son más solubles y, por lo tanto, se absorben e incorporan mejor a los sistemas biológicos y las estructuras corporales. En las formas orgánicas o complejas de oligoelementos el elemento traza se une a un cierto ligando, que normalmente es parte de un aminoácido o péptido.

    B-Traxim Pro4

 

       Inorgánico


Los minerales orgánicos unidos a glicina son biológicamente más disponibles que las fuentes inorgánicas, esto ha sido determinado por diversos estudios realizados:

  • En un estudio realizado con novillos raza Angus cuyo objetivo fue determinar los efectos del nivel y la fuente de Zn en la dieta sobre el metabolismo de Zn y los patrones de ácido graso volátil ruminal comparando cuatro tratamientos que consistieron en:
  1. dieta deficiente de Zn
  2. dieta suplementada con sulfato de Zn
  3. dieta suplementada con metionina de Zn
  4. dieta suplementada con glicina de Zn.

La excreción urinaria de Zn fue mayor (P <0.05) para la dieta suplementada con glicinato de Zn versus las dietas 1 y 2. La absorción y retención aparentes de Zn tendieron a ser mayores para la suplementación con glicinato de Zn versus los otros tres tratamientos. La concentración de Zn en el hígado fue mayor (P <0,05) al día 42 en el grupo suplementado con glicinato de Zn, en comparación con los otros tres tratamientos. Los resultados sugieren que el glicinato de Zn es más biodisponible que el sulfato de Zn y la metionina de Zn.


Del mismo modo en un estudio realizado con corderos en crecimiento cuyo objetivo fue evaluar la biodisponibilidad del Zn (determinada por la absorción aparente y retención de Zn, así como el contenido del mineral en hígado cerebro y riñón) de raciones suplementadas con base a glicinato de Zn u óxido de Zn, se concluyó que la biodisponibilidad del glicinato de Zn fue mayor. Los resultados anteriores son consistentes con otro trabajo realizado con corderos en crecimiento en el que se estimó la biodisponibilidad de Zn derivada de complejos de aminoácidos con metionina, lisina y glicina. Se utilizó un grupo control al cuál se le proporcionó óxido de Zn como suplemento. La absorción aparente y retención de Zn fue mayor (P≤0.01) en corderos que recibieron las mezclas que contenían complejos de aminoácidos de Zn que en animales que consumieron óxido de Zn.

Finalmente se evaluó la biodisponibilidad de glicinato de cobre en comparación con sulfato de cobre en becerros alimentado con dietas altas en S y Mo. Para monitorear los niveles de cobre se tomaron como referencia la ceruloplasmina, el cobre plasmático y hepático. Se concluyó que con respecto a las dos fuentes de cobre utilizadas la biodisponibilidad del elemento fue mayor cuando se suministró glicinato de cobre proporcionando dietas altas en S y Mo (antagonistas del cobre).